Si notamos que algo no va bien en nuestra casa, si dormimos unos días fuera de nuestro hogar y nos sentimos más descansados, es muy probable que estemos padeciendo síntomas debido a que nuestra casa está enferma.
Los síntomas más habituales pueden ser que nos levantemos cansados por las mañanas, nos despertemos varias veces durante la noche, padecemos dolores de cabeza frecuentemente o nos cuesta respirar. Estos síntomas se pueden agravar en personas con el sistema inmune debilitado, niños o personas de edad avanzada.
¿Qué es lo que está provocando que mi casa esté enferma?
Los niveles inadecuados de humedad y temperatura; la contaminación del ambiente interior puede ser mayor aún que la del exterior; puede haber instalaciones o aparatos eléctricos que estén provocando campos electromagnéticos o incluso puede haber un exceso de carga de electricidad estática debido al uso de materiales sintéticos para la decoración del hogar.
Cuales son los síntomas que presentan las personas que viven en casas enfermas
_Debido a la presencia de contaminantes en el aire: El exceso de sustancias tóxicas en el aire puede deberse a que haya materiales dentro de la casa que estén desprendiendo estos contaminantes como pueden ser las pinturas, los barnices, resinas o plásticos. Las afecciones más habituales son las relacionadas con el sistema respiratorio; alergias crónicas, asma, bronquitis, sinusitis,…en caso de larga exposición.
_La presencia de campos electromagnéticos elevados nos afectan de la siguiente manera, provocando nerviosismo, ansiedad o irritabilidad. Patologías más graves puedes aparecer si estos campos ya afectan directamente a las glándulas pineal o tiroides.
_La carga electrostática excesiva puede hacer que nos den calambres cuando entras en contacto con materiales metálicos o sintéticos. Una exposición prolongada a este tipo de carga provoca alteraciones del carácter, del estado de ánimo o de la calidad del sueño.
_Los niveles inadecuados de humedad y temperatura, provocan un elevado grado de humedad y la aparición de hongos que liberan esporas que respiramos e ingerimos. Esto provoca trastornos respiratorios, digestivos o problemas de salud más graves si permanecemos mucho tiempo expuestos.